Descripción
El colágeno es producido entre otras células por los fibroblastos, las células principales en el tejido conectivo.
Los aminoácidos principales en la formación de estas proteínas son la glicina, la prolina, arginina e hidroxiprolina.
El colágeno está constituido por cadenas de aminoácidos que aportan resistencia y flexibilidad a nuestros tejidos.
Este es un componente muy importante de los huesos, tendones, ligamentos, cartílagos y piel.
También protege nuestros músculos y órganos vitales y forma parte de la pared de los vasos sanguíneos, córnea, dientes, encías y el cuero cabelludo.
Un 25% de la masa proteica de nuestro cuerpo es colágeno y forma el 75% del tejido conjuntivo.
El colágeno actúa como el “esqueleto”, el soporte de nuestra piel. Una de las causas de la flacidez de la piel es la disminución de colágeno.
A los 40 años producimos la mitad de colágeno que en la adolescencia. Esto genera un envejecimiento y una pérdida de flexibilidad importante en los tejidos que contienen colágeno.
Principalmente el colágeno aporta fuerza y elasticidad a los órganos del tejido conectivo, el colágeno se va renovando, la piel y a los músculos y así evitar la flacidez en el cuerpo, especialmente en los brazos, las piernas y el abdomen.
- Disminuye el dolor, la inflamación y la rigidez de la artritis reumatoide, la osteoartritis, la artritis juvenil y la gota.
- Interviene en la reparación del tejido de los cartílagos Fortalece los huesos, las articulaciones y las uñas.
- Mejora la firmeza de la piel y ayuda a cicatrizar las heridas y fortalece el pelo.
- Ayuda al cuerpo a recuperarse después del ejercicio evitando el cansancio y la fatiga, regenera las zonas osteoarticulares afectadas.