Vitamina C 1000 + Protect 90 comp Espadiet

Descripción

La vitamina C o ácido ascórbico es muy sensible a las oxidación, y se destruye fácilmente con el calor. Así, cuando complementamos nuestra dieta con nutrientes de vitamina C, es aconsejable que esta esté asociada a otras sustancias que permitan su conservación y disponibilidad en el organismo. La vitamina C desempeña un papel fundamental en la materia de las funciones metabólicas, pues está presente en la formación de todos los tejidos del organismo.

La vitamina C es necesaria para la formación del colágeno, substancia requerida para que nuestro organismo elabore los huesos, cartílagos, dientes; que repare las células de todos los tejidos corporales y vasos sanguíneos. Reduce la formación de arrugas y la flacidez de la piel que acompañan al envejecimiento. También ayuda a conservar las membranas mucosas y es indispensable para la producción hormonal de las glándulas suprarrenales. También hace posible la correcta absorción del calcio y fósforo, evitando unos huesos blandos y unos dientes frágiles.

La vitamina C es absolutamente necesaria para la función y actividad del sistema inmunológico. Un nivel óptimo de vitamina C hace que el sistema inmunitario pueda sintetizar mejor el interferir. Esta es. Una sustancia que crea el organismo en repuesta a la infección.

Los radicales libres (oxidantes) se generan en el curso normal del metabolismo y también se encuentran comúnmente en el medio ambiente. Oxidan células sanas que se volverán así en reactivas, es decir, serán radicales libres a su vez y dañinas para el organismo. La vitamina C confunde al radical como célula sana y al ser oxidada es inocua en este estado para el organismo, previene la destrucción de células sanas.